Desde hace unos años el enoturismo ha sido una de las actividades turísticas con más aceptación por parte de la población. Rara es la Denominación de Origen que no tenga entre sus bodegas, gracias al poder de atracción de sus instalaciones y sobre todo sus vinos, alguna que no ofrezca la posibilidad de conocer la cultura o gastronomía del entorno que la rodea.
Aunque también son muchas las ciudades que han apostado por ofrecer este tipo de turismo del vino o enoturismo a través de espacios más pequeños y sugerentes que sumergen al cliente en todo un mundo de sensaciones, aromas y sabores, como son las vinotecas.
Con la idea de llegar a este tipo de cliente, un grupo de amigos crearon en Valladolid la Vinoteca Señorita Malauva. Una propuesta innovadora que intenta atraer al cliente a conocer, de diferentes formas y maneras, lo que puede dar de si una copa de vino.
Situada en el centro histórico de la ciudad, justo al lado de la Catedral de San Pablo, la Vinoteca Malauva es un espacio, de pequeñas dimensiones, pero sumamente acogedor, en el cual ofrece al cliente un maridaje de experiencias que parten del vino y abarcan ramas tan diversas como el diseño o la gastronomía.
Entre todas estas experiencias, es muy recomendable escoger entre una de sus muchas degustaciones, la mayoría sin necesidad de reservar y con el denominador común de la originalidad, como puede ser la cata «Señorita Malauva«, que consiste en una cata de iniciación de tres vinos y dirigida por un guía de enoturismo, que nos dará una breve explicación de cada uno de ellos, así como una pequeña reseña de la zona donde se haya la bodega que lo ha elaborado.
Una propuesta bastante económica, ya que por 5,50€ podremos degustar unos vinos especiales además de llevarnos la copa donde los hemos degustado, con el logotipo de la propia vinoteca. Aparte de esta cata también podemos destacar otros maridajes como el «Con pan y vino se anda el camino«, «Casino del Vino«, «Descubre un mundo nuevo«, entre otras muchas.
Por supuesto, La Señorita Malauva también dispone de cursos para los que quieran profundizar en la enología, además de un club de aficionados al vino para el que organizan frecuentes actividades programadas como catas especiales las noches de los jueves, visitas a bodegas de la zona o descuentos en los vinos de la propia vinoteca.
Sin duda una buena forma de conocer los vinos de Valladolid, su gastronomía y su cultura es pasarse por la Vinoteca Señorita Malauva y dejarse tentar por cualquiera de sus «encantos».
