En el año 1989 Javier Cremades de Adaro adquirió la Finca Real Sitio de Ventosilla con la intención de elaborar vinos de calidad. Años más tarde, más concretamente en 1996, nacía Bodegas PradoRey.
Bodegas PradoRey se ubica en el interior de la finca más grande del norte de España. Más de 3000 hectáreas de superficie, de las cuales 520 corresponden a viñedos y el resto lo componen montes de encinas, pino y enebro así como otros cultivos, una explotación ganadera y una central eléctrica en el Duero de la que se abastece.
El Real Sitio de la Ventosilla fue propiedad de la reina Isabel la Católica hasta que pasó a manos del Marqués de Denia, ascendente de D. Francisco Gómez Sandoval y Rojas, duque de Lerma y valido de Felipe III, que hizo construir en este terreno, un palacio para acoger al monarca en sus habituales visitas. Aquel antiguo palacio construido en estilo Herreriano es hoy en día La Posada de PRADOREY, una posada que cuenta con un total de 18 exquisitas habitaciones.
En un futuro no muy lejano, este Real Sitio será sometido a una reforma muy completa, tanto de las habitaciones de la La Posada como su contorno, teniendo planificado la sustitución de la granja de vacuno que rodea la posada por más viñedos. Esto hará que entre La Posada y la Bodega PRADOREY haya un gran viñedo en el cual, atravesándolo, hará que el huésped pueda ir desde la Posada hasta la bodega dando un relajante paseo entre vides.
PradoRey, mucho más que enoturismo en la Ribera del Duero
Hoy en día el enoturismo es una actividad que cualquier región vitivinicola la tiene muy viva y activa. Puede parecer que el enoturismo sólo es acercarse a cualquier bodega a visitar su terruño, conocer sus viñas y catar sus vinos. El Enoturismo es esto y mucho más…Y todo depende de la época en que visites la bodega. Lo más normal es visitar la bodega en época de vendimias, de esta forma, aparte de conocer lo anterior, se puede realizar una cata de uvas en el propio viñedo, pudiendo entender mejor el porqué del color del vino o por qué se sabe cuándo una uva está en su momento óptimo de maduración, y por tanto lista para vendimiar.
Todo esto se realiza sobre el terreno, en un paraje único que hizo que los paisanos del lugar dieran por «loco» a Javier Cremades de Adaro. Un apasionado del vino cuyo sueño siempre fue elaborar vinos únicos y fieles a la tierra y que tras una larga e incansable búsqueda, encontró en los parajes históricos de la finca Real Sitio de Ventosilla donde comenzó su sueño de cultivar viñedos.
Pradorey es una de las bodegas con más solera en la Ribera del Duero, siempre han tenido claro que la innovación tecnológica, junto con la osadía de sus dueños, es parte del camino… Un camino que iniciaron hace ya unos cuantos años cuando fueron los primeros en apostar por la elaboración de vinos jóvenes en barrica denominados «Roble». También fueron los pioneros en la elaboración de los vinos «Blush Rosé» y en hacer vinos «Blancos» con uva Tempranillo. Pero esto no es todo…
Desde hace unos años están volviendo su mirada al pasado, aunque esto solo es para ver cómo se elaboraba el vino en su origen, sin artificios y elaborado de una manera artesanal y criado en barro.
Con más de treinta años a sus espaldas no les asusta volver a lo artesano. Al contrario, quieren romper mitos. Han comprobado que la innovación no está reñida con la forma primitiva de elaborar vino. De hecho esta unión les ha sorprendido tanto que ya cuentan con ella para la elaboración de vinos de alta gama que sorprendan nuevamente el paladar del consumidor. Vinos de Tinaja como El Buen Alfarero, el primer vino de tinaja que se elabora a la vieja usanza.
Vendimiando la uva a mano. Pisándola y guardando el mosto como oro en paño en tinajas de barro centenarias donde se batuquea manualmente, dejando hacer el vino de forma natural.
Historia, vino y gastronomía en las IX Jornadas de Teatro Barroco de Bodegas PRADOREY
Las Jornadas de Teatro Barroco son un homenaje a la historia de PRADOREY. La historia de la bodega, de la Posada Real Sitio de Ventosilla y la finca en la que se ubican, que un día pertenecieron a la realeza y por las que pasaron y, dejaron huella, ilustres personajes como Felipe III, Lope de Vega o Ruben. Los jardínes de la Posada fueron en otro tiempo escenario de una obra de teatro escrita por Lope de Vega para el rey y es por eso por lo que recuerdan y homenajean ese momento cada verano.
Las Jornadas de Teatro Barroco son una cita imprescindible para todas aquellas personas que sean unas apasionadas de la cultura, de la historia, la gastronomía o simplemente que quieran disfrutar de una propuesta original y única en un escenario inigualable como es la Posada del Real Sitio de Ventosilla.
