A mediados del siglo XX los cebiches eran vendidos en puestos móviles por muchas calles de la ciudad de Lima. Estos puestos eran "regentados" por mujeres o cebicheras que obsequiaban a sus clientes con el jugo o caldo que les sobraban. Año tras año, estos jugos o zumos de cebiche se fueron modificando, a la par que los puestos pasaban de madres a hijos e hijas, que le han ido aportando sus "ingredientes secretos". Con el tiempo este jugo o caldo de cebiche fue denominado Leche de Tigre, gracias a las virtudes que le atribuyeron como reconstituyente contra la resaca o como afrodisiaco. Es más, el restaurante "La Mar" que el gran cocinero Gastón Acurio tiene en la ciudad de Lima (Perú), lo "vende" en su carta como "el perfecto levantamuertos".
Este cebiche de cinco toneladas de pescado blanco intentará romper el récord Guinness que ahora ostentan los mexicanos, que lograron en 2007 ese "premio" al preparar 4 toneladas y media de su propia versión del cebiche, por cierto, diferente al cebiche peruano.