Según una investigación del John Innes Centre, en Norwich (este de Inglaterra), el consumo de tomates morados, modificados genéticamente para que tengan unos altos niveles de antocianinas, protegen contra el cáncer y un amplio número de enfermedades.
La investigación, dirigida por Cathie Martin y publicada en la revista científica británica «Nature Biotechnology«, ha dado como resultado este sorprendente resultado que de ser «apto» para humanos, ya que han sido ratones de laboratorio los primeros en probarlos, sería un gran éxito de la ciencia, ya que se podría prolongar substancialmente la vida de las personas que padecen algún tipo de esta enfermedad.
Por lo visto, la ingesta de alimentos con antocianinas, pigmentos antioxidantes producidos por algunas plantas, contribuirían a la protección contra un gran número de enfermedades humanas. Sin embargo los niveles de estas sustancias en las frutas que más se consumen habitualmente no son suficientes para conseguir esa protección.
Para llevar a cabo la investigación, los científicos, incluyeron dos genes de la especie boca de dragón, rica en antocianinas, en el genoma de la tomatera. Después estos plantones dieron tomates con la pulpa y la piel moradas y con un nivel de antocianinas similar al existente en moras y arándanos.
La expresión de los dos genes introducidos en la tomatera procedentes de la boca de dragón potenció la capacidad de los tomates de actuar como antioxidantes hidrofílicos
Cathie Martin asegura que muchas personas no ingieren las cinco porciones diarias recomendadas de frutas y verduras, pero que aún así pueden recibir mayores beneficios si las porciones que consumen son desarrolladas con más componentes bioactivos.
Por ello los científicos explican que la inclusión de estos tomates transgénicos en la dieta humana sería una «forma fácil» de aumentar la ingesta de antioxidantes y fomentar la salud.
Aunque pasarán unos cuantos de años antes de que tengamos en el mercado tomates con estas características.
Vía: elpais.com
Vía: gastronomiaycia.com
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