Preparamos una espuma de piñón y reservamos 2 horas en la nevera.
Hacemos los solomillos de ternera, a nuestro gusto, en una plancha con unas gotas de aceite de oliva.
Emplatamos con un poco de flor de sal sobre la carne y echamos un poco de espuma de piñón en cada plato.
Servimos y degustamos.
Notas de la receta
Los primeros cristales que se forman al extraer la sal se conocen como «flor de sal«. Por su delicado sabor, es un ingrediente extraordinario e ideal para esta receta.