Para preparar unos buenos langostinos cocidos lo más importante es la calidad de éstos. Si bien lo mejor es que sean frescos, a no ser que estemos en zona costera o tengamos una buena "cartera", muchos optamos por los langostinos ultra congelados. En el mercado hay infinidad de variedades y marcas, entre las cuales encontraremos la que más nos convenga. Una vez hayamos elegido los langostinos
Recetas de Cocina
Recetas de cocina caseras y fáciles, pinchos, tapas, entrantes, cocina de vanguardia, cocina tradicional, las recetas de los grandes CHEFS, como combinar ingredientes.
Hay veces que las recetas más sencillas son las que mejor nos saben. Y esta ensalada de canónigos y langostinos es una buena prueba de ello. Quien me iba a decir a mí que iba a disfrutar tanto viendo como el resto de la familia ponía cara de satisfacción cada vez que daban un bocado a esta sencilla ensalada de canónigos y langostinos. Y digo sencilla porque realmente lo es. Para hacer la ensalada de canónigos y langostinos tan sólo debemos de tener a mano un envase de canónigos y langostinos de buena calidad. En esta ocasión son langostinos tigres crudos y ultra congelados.
Desde que tengo uso de la memoria recuerdo que todos los años, los días previos a la Semana Santa, acompañaba a mi madre al horno del panadero del pueblo a elaborar hornazos. La verdad es que antes de esto mi madre tenía que llamar al panadero para decirle cuantos hornazos iba a preparar y a qué hora podía ir al horno. Este le decía la hora concreta y a mi madre el día de antes solo la quedaba freír o saltear el relleno de los hornazos. Siempre chorizo y lomo adobado. El día en cuestión mi madre preparaba una cesta en la que introducía una fuente con el embutido frito, un par de mandiles, una botella de agua y unos paños de cocina. Una vez hecho esto, sólo la quedaba ir hasta el horno de la panadería y colocarse en su puesto, junto con una gran cantidad de mujeres que estaban con ella en ese turno.
De niño recuerdo que mi madre preparaba filetes rusos en grandes cantidades, con la intención de que sobrasen y asi tener preparada la cena del día siguiente. Que por cierto, casi estaban más ricos que el día anterior. Me encantaba prepararme bocadillos de filete ruso y tomate frito casero. Toda una delicia. Ahora soy yo quien elabora los filetes rusos para mis hijos y me encanta ver como se montan sus propios bocadillos en la mesa, sin haberles dicho nada. ¿Será cosa de genes? Lo que sí que es cierto es que los filetes rusos en plato invitan al comensal a comérselos dentro de un buen trozo de pan. Y si encima se le añade una buena salsa de tomate casera, que se desparrama por nuestras comisuras de la boca en cada mordisco, la sensación de satisfacción será plena.
Desde que hicimos el bizcocho de chocolate y cerveza negra, con el que posteriormente elaboramos la Tarta de Chocolate con queso, crema de castañas y frutos rojos para Navidad, en casa no hay otra receta de bizcocho de chocolate que pueda preparar. Y no será porque no lo intenté, que tengo unas cuantas propuestas en mi recetario. La cuestión es que éste bizcocho en particular tiene una textura y esponjosidad única y muy especial.
Ayer el peque me pidió para comer lasaña de carne, su plato favorito. Y como era su cumpleaños, no le pude decir que no. Pero cómo suele pasar a la hora de preparar una receta "especial", siempre te falta algún ingrediente, esta vez faltaba en mi despensa las "dichosas" láminas de lasaña. Sin encambio tenía unos cuantos envases de tallarines y espaguetis de varios tipos (negros, de salmón y de huevo) abiertos de otras ocasiones, para usar como capas de pasta. No he tardado mucho en convencer al peque de cambiar las placas de lasaña por unas capas de espaguetis. El resultado le ha gustado tanto que para la próxima ocasión en vez de lasaña me pedirá pastel de espaguetis y carne.
Estando en plena temporada de jurel, también conocido como chicharro o Txitxarro, es casi imposible resistirse a comprar un par de piezas, bien frescas y plateadas, para tomar simple y sencillamente a la plancha. Luego si queremos complicar algo más la receta, podemos acompañar el jurel a la plancha de infinidad de guarniciones. Para esta receta, aunque lo parezca, no nos hemos complicado mucho la vida, y hemos preparado un cuscús de caldo de verdura y una emulsión de ajo y salvia, que le han ido de maravilla al jurel a la plancha.
Cada vez que tomamos una quiché solemos decir que por qué no la preparamos más veces. Y es que es un tipo de elaboración que, aparte de estar deliciosa, nos quita de más un apuro. Me explico. Una visita inesperada, una comida/cena de amigos a la cual no sabes que llevar, una celebración familiar, un capricho culinario..., pues para todo esto y más, con una quiche quedamos fenomenal. Y lo mejor es que se prepara en un periquete, se hace en menos de una hora, y podemos hacerla de un día para otro. La única condición es que tengamos en nuestro congelador una masa de hojaldre, o en la nevera una masa de hojaldre fresca, como en nuestro caso a la hora de elaborar esta “Quiché de sobrasada y orejones”.
Cada vez que mi madre hacía hornazos por Semana Santa, siempre la gustaba elaborar una empanada con la masa que sobraba de estos. Como a nosotros no nos sobró ni una pizca cuando elaboramos el Hornazo Castellano, hemos preparado la misma masa de hornazo para elaborar esta empanada de jamón y queso.
Hace ya cuatro años, si cuatro años ya, os hablamos del carpaccio de buey. Un producto que hasta entonces sólo se podía degustar en muchos restaurantes y que, gracias a Mercadona, podíamos llevarlo hasta nuestras mesas. Desde entonces podemos encontrar en los lineales de muchos supermercados y grandes superficies, todo tipo de carpaccios de gran calidad, listos para abrir, aderezar y degustar como el que os mostramos hoy: carpaccio de lomo de cerdo ibérico. Un producto que, como ya te hemos comentado, está listo para degustar tal cual, en esta receta hemos acompañado por una vinagreta de fresas y queso parmesano, que le ha aportado vistosidad, sabor y frescura.
Debo reconocer que es la primera vez que preparo ñoquis en mi cocina. Y la verdad, a pesar de que es algo laboriosa su elaboración, los ñoquis nos han gustado, y mucho. Los ñoquis o gnocchi es un tipo de pasta que puede elaborarse con diferentes ingredientes como patata, yuca, plátano, entre otros, dependiendo del país donde se elabore.
Desde que compramos la heladera son pocas las semanas que no preparamos algún helado casero, como este helado de nueces de macadamia, que elaboramos el verano pasado. Chocolate, vainilla y arroz con leche son otros helados que hemos elaborado, y de los cuales os mostraremos poco a poco las recetas, aunque en esta ocasión os queremos enseñar una versión de la tarta de queso helada. El resultado, un postre verdaderamente delicioso: Helado de Tarta de Queso.