La receta de Codillo de cerdo asado es una de esas elaboraciones que se hacen con los ojos cerrados, pero qué cuando los abres te quedas asombrado de su resultado: Una carne brillante, jugosa, melosa que se deshace en la boca…
Colocamos sobre una fuente de horno, cubrimos la base con agua y horneamos durante 60 minutos a 160º.
Damos la vuelta a los codillos e introducimos nuevamente al horno otros 50 minutos más.
Sacamos la fuente, vertemos un par de cucharadas de jugo del asado en un cuenco y añadimos los ingredientes del glaseado de miel y naranja.
Mezclamos y pincelamos los codillos.
Introducimos de nuevo al horno. Subimos la temperatura a 180º y dejamos dorar durante 20 minutos, glaseando de vez en cuando.
Les damos de nuevo la vuelta, pincelamos y horneamos otros 15 minutos más a 190º.
Comprobamos que la carne de los codillos está hecha, pinchando con una brocheta de madera o aguja de punto. Esta debe de entrar sin resistencia. Si «nos cuesta», horneamos hasta conseguir el punto de asado deseado.
Sacamos los codillos de cerdo asados, servimos y degustamos.
Notas de la receta
Podemos acompañar los codillos de cerdo asados con un puré de patatas, una ensalada, el típico Chucrut alemán, o con unas verduras salteadas en el momento.