Este chuletón de vaca selecta madurado lo hemos preparado de una manera un poco diferente a como se suele servir en cualquier restaurante o asador tradicional
¿Sabes cuál es la diferencia entre una chuleta, un chuletón y un entrecot? Un costillar tiene 13 chuletas, las cuales se dividen en dos tramos: el lomo alto y lomo bajo. El lomo alto cuenta con 8 chuletas, mientras que el lomo bajo tiene 5. La diferencia que hay entre ambos, pues que las chuletas de lomo alto suelen tener más cantidad de grasa, en comparación con las del lomo bajo.
Si este costillar lo despiezamos, en vez de sacar las 13 chuletas, obtendríamos chuletones (haciendo cortes del lomo alto incluyendo el hueso) y entrecots, un corte que proviene del francés «entrecôte» -significa “entre las costillas”- que se obtendrían del corte de carne que hay entre hueso y hueso del costillar.
Pero lo que realmente determina del resultado, tanto de la chuleta, chuletón o entrecot, es la calidad de la carne. Una de las empresas cárnicas especializadas en carne gourmet es Rubiato Paredes, con más de 50 años en el sector cárnico y especializado en restauración y hostelería, que ha puesto en marcha una tienda online para disfrute de todas aquellas personas que así lo deseen, puedan recibir sus productos en su casa.
Unos productos únicos como este chuletón de vaca selecta madurado que hemos preparado de una manera un poco diferente a como se suele servir en cualquier restaurante o asador tradicional.
Sacamos el chuletón del envoltorio y dejamos atemperar durante un par de horas sobre la encimera, antes de su elaboración y posterior degustación.
Cuando ya sea la hora, ponemos sobre el fuego una plancha o sartén grande. Cuando esté caliente añadimos la manteca de vaca o mantequilla en ella.
Dejamos que se derrita e incorporamos el chuletón.
Pasado un par de minutos incorporamos alrededor de él unas ramitas de tomillo o romero fresco para aromatizar la carne y que de sabor a la salsa posterior.
Hacer la carne durante unos 3 minutos por cada lado, si nos gusta al punto, más tiempo si preferís la carne más hecha.
Una vez hecho el chuletón a nuestro gusto, dejamos templar un par de minutos antes de su degustación, en lo que calentamos unos pimientos del piquillo cómo acompañamiento.
Fileteamos el chuletón en la propia sartén, salseamos con sus jugos, y servimos.