Lavar y limpiar la alcachofa de Jerusalén. Hornearla en una bandeja a 185º durante 15-20 minutos. Dividirla en dos, sacando la carne, pero manteniendo el exterior entero.
Después, secar en el horno a 75º durante 15 minutos. Finalmente, freír en abundante aceite el exterior a fuego bajo (140º) hasta que se dore.
Calentar la nata con el bacalao, tomillo, pimienta y el ajo hasta que las lascas del pescado se separen.
Freír a la plancha pequeños dados de apio con la mantequilla. Añadir las chalotas trituradas con un chorrito de limón.
Añadir 50g de la carne de la alcachofa de Jerusalén y mezclar con el bacalao, el aceite de oliva y el resto de la nata. Salpimentar y añadir zumo de limón a gusto.
Incluir la mezcla con la alcachofa. Esparcir las algas y el stockfish de Lofoten, Noruega.