Probamos el aceite de Masía El Altet, elegido en diferentes concursos como uno de los mejores aceites de oliva virgen extra del mundo.
Cuando llegamos a la habitación del Hotel Melià Alicante, nos encontramos encima de la cama una bolsa especial en la cual se incluían pequeñas delicatesen, cortesía del Gourmet Experience de El Corte Inglés, entre las cuales se encontraba este aceite de oliva virgen extra Masía El Altet.
Solo con ver la botella se intuye que su contenido debe ser muy especial, y tras su degustación, se confirma la gran calidad de este aceite de oliva virgen extra, obtenido de aceitunas que se recolectan en la finca olivarera Masía El Altet, sita entre los parques naturales de la Font Roja y de la Sierra Mariola, parajes agrestes de la montaña alicantina, en el término municipal de Alcoy.
Gracias a la situación del olivar, con más de 14.000 árboles de diferentes variedades (picual, arbequina y otras autóctonas como alfafarenca, blanqueta y genovesa), así como el particular microclima de la zona, se obtiene unas olivas únicas, con unas excepcionales características organolépticas que combinadas entre sí elaboran aceites que han sido premiados en todos los concursos al que se han presentado, desde que se empezarán a comercializar en el año 2006.
Y estos premios son más que merecidos, de hecho dicen del aceite de oliva virgen extra Masía El Altet que es el mejor aceite del mundo. Gracias a la complejidad de sus aromas y a la intensidad de su sabor, que le han convertido en el aceite preferido de grandes cocineros a nivel nacional e internacional.
Comercializado en botellas de 50 cl. el aceite de oliva virgen extra Masía El Altet se puede encontrar en tiendas gourmet físicas y de Internet a un precio entre 10 y 12 euros la unidad.
Si te haces con una botella de Masía El Altet, que aunque pueda parecer lo contrario da mucho de sí, podrás disfrutar de este aceite sólo, untado con un «simple» trozo de pan, en emulsiones veraniegas tipo gazpacho o cremas, o bien como aderezo de una ensalada muy especial.