La Piadina, piada o «Piadina Romagnola» es una especie de pan plano elaborado con harina de trigo de origen italiano, que acompaña perfectamente cualquier tipo de alimento.
La Piadina, según la Wikipedia, “es un pan plano elaborado con harina de trigo de origen italiano, típico de las provincias de la Romagna”.
Hace ya unos cuantos siglos las clases más pobres de la región Emilia Romagna, al norte de Italia, se alimentaban a diario con este tipo de pan, gracias en parte a que sus básicos ingredientes estaban a su alcance (harina de trigo, agua y manteca de cerdo), y de fácil elaboración.
Una vez formada la masa esta se podía hacer en el momento o bien se la llevaban al trabajo donde, una vez finalizaban sus tareas en el campo, la cocinaban sobre una plancha a la brasa y la rellenaban con todo tipo de alimentos, dependiendo de la despensa de cada hogar, con carnes, fiambres, verduras o, generalmente, solas.
Este tipo de pan plano ácimo (sin levadura), ha sido consumido por la humanidad a lo largo de su historia, de hecho casi todos ellos son muy parecidos en la elaboración como en los ingredientes. Por ejemplo la piadina italiana es muy parecida a las tortitas mexicanas, la figazza árabe (pan pita), el flatbrød noruego, los Pappadums indios, o, volviendo a Italia, la masa de pizza e incluso la focaccia.
Como ocurre con todos esos tipos de panes, la piadina se suele consumir a modo de pizza, con cualquier tipo de ingrediente. Enrollada sobre si misma, o bien como acompañamiento a cualquier plato, rociada con un hilo de aceite de oliva virgen.
Las piadinas se pueden encontrar en cualquier supermercado o grandes superficies en varios formatos de 15 o 24 centímetros de diámetro y a un precio que oscila entre los 2 y 4 euros el envase, dependiendo del tamaño y cantidad.
Un precio algo elevado si tenemos en cuenta que sus ingredientes son muy comunes en cualquier cocina. En esta ocasión os mostramos las Piadinas «industriales» aunque, viendo su versatilidad en la cocina pronto os pondremos la receta de Piadinas caseras.