La perdiz tiene bastantes formas de preparación, a la plancha, guisada, con alubias, en arroz... La receta que proponemos, creo que, es la forma en que más veces encontramos elaborada esta ave.
Mientras pienso que propósitos hago de cara a la nueva temporada, voy a prepara una lasaña de verdura y carne que posteriormente congelaré en moldes, de unas tres o cuatro raciones cada uno, que nos serán muy útil para esos días que no hemos preparado la compra, no tenemos nada en la nevera o, lo más seguro, no tenemos tiempo para preparar la comida o la cena por otro tipo de obligaciones.
Estando el otro día en el hipermercado, me encontré con unos envases de raviolis de pasta fresca rellenos de boletus que tenían una de esas ofertas de "la segunda unidad al 70%". Luego ya en la cocina, aprovechando que tenía unos níscalos frescos, prepare unos deliciosos raviolis rellenos de boletus en salsa de níscalos. Una receta muy otoñal, con pleno sabor a bosque.
Vamos con una de esas recetas "especiales" para sorprender a nuestros invitados. Aunque con el nombre te pueda llevar a pensar que necesitas máquinas o robots de cocina carísimos, todo lo contrario. Para confitar el salmón a baja temperatura podemos hacerlo de dos maneras: en una olla sobre fuego (vitro, gas, etc.) o bien en el horno, como ha sido en esta ocasión, y que os mostraremos a continuación.
Este Salteado de boletus con huevo es uno de los mayores manjares que podemos tomar en otoño. Una receta sencilla y "simple" que envuelve nuestro paladar con sabores plenos y limpios. Tomando como base unos boletus frescos (también sirven congelados), y unos cuantos huevos de corral, lo demás será "hacer saquitos y atar".
Estamos acostumbrados a preparar bizcochos de tamaño familiar, vamos de los de toda la vida. Ya sean redondos, cuadrados o rectangulares. Pero siempre de meter el cuchillo, cuando no es a pellizcos, para obtener un buen trozo que llevarnos a la boca. El otro día buscando un molde redondo (grande) para hacer un bizcocho me topé con unos moldes para tartaletas que tenía arrinconadas en el cajón. Me pareció un tamaño perfecto para hacer unos "bizcochitos". Dicho y hecho. ¡Lo tienen todo! Esponjosos, con el toque que le aporta la mantequilla y el aceite de oliva virgen extra, las nueces y sobre todo el sabor de la ralladura de limón y el tomillo fresco.
Una de las tartas saladas que más nos ha gustado, y sorprendido, de las muchas que tenemos en nuestro recetario es la Tarta de tomates y queso de cabra que os mostramos hoy. Gracias a la gran cantidad de verduras y hortalizas que encontramos en la temporada de verano, podemos hacer diferentes tartas saladas, dependiendo de nuestros gustos.
Si bien el refrán dice que “Los espárragos de abril, para mí; los de mayo, para mi amo; los de junio, para ninguno”, todavía podemos encontrar en el mercado espárragos frescos de muy buena calidad. Si nunca te has atrevido, o animado, a cocer los espárragos en tu cocina, te aconsejo que lo hagas, porque su sabor y textura nada tienen que ver con los que venden ya envasados.
La receta que os presentamos hoy no es nuestra, es del cocinero noruego Øyvind Bøe que ha sido proclamado vencedor...
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