Receta de quichés tenemos unas cuantas en nuestro recetario particular. Hemos preparado quiches de todo, de sobrasada y orejones, de beicon y champiñones, con espinacas y piñones, quiché guisantes y salami al tartufo, quiché salmón de setas, quiche de cecina con queso brie, etc. Aunque entre tanta opción nos faltaba la Quiche de verduras. Una receta que se puede hacer de dos maneras: con la verdura salteada previamente, o añadida al natural, como os mostramos a continuación.
Para hacer un Caldo Casero tradicional no hace falta ser Arguiñano, basta con tener los ingredientes, una cazuela, agua y fuego o una fuente de calor tipo vitrocerámica, que una cocina a leña es pedir mucho. En el súper, o grandes superficies, podemos encontrar bandejas con ingredientes suficientes para hacer caldo de puchero, es decir huesos blancos o de caña, un trozo de carne de vacuno, un trozo de pollo o gallina, un hueso de jamón añejo, etc. Un producto que, por poco más de tres euros, puede ofrecernos un caldo tradicional de lo más resultón y casero. Aunque nosotros os recomendamos que vayáis a vuestra carnicería de confianza y pidáis al carnicero carne y huesos para hacer caldo o cocido.
Esta receta de "Pechugas de pollo rellenas de boletus en salsa de piquillos", combina tres ingredientes que casan a la perfección y que otorgan una clase a este plato excepcional. Una receta de Pechugas de pollo simple en el concepto pero exquisita en el paladar, de las que tradicionalmente se denominan "de toma pan y moja".
La palometa, también es conocida como japuta, castañeta o zapatero, es una de las variedades de pescado que encontramos todo el año en las pescaderías. Hay mucha gente que todavía no la ha probado solamente por su aspecto, parece una piraña de color negro, pero no nos engañemos, aunque sea un pescado de los "feos" y humilde, su carne es muy sabrosa y versátil en la cocina.
Para celebrar la llegada del invierno, y por que no, la Navidad, os propongo esta receta: "Sopa de pescado con fideos". Esta receta de Sopa de pescado con fideos es una sopa casera muy rica y saludable que gusta mucho a todos. Se elabora de manera fácil y con unos ingredientes sencillos.
Esta receta bien nos vale para uno de los muchos días de celebraciones que tenemos en la Navidad. Los he rellenado con un sofrito de cigalas, pero acepta cualquier cambio, langostinos, buey de mar (sin cáscara), lenguado, rodaballo, etc.
Gracias a su versatilidad, su fácil elaboración, que tiene pocas espinas y, sobre todo, su gran sabor, el bonito es uno de los pescados que mas se cocinan en verano. Da igual como lo hagamos, en Marmitako, escabechado, a la plancha con salsa de piquillos, en lasaña, de manera sorprendente, e incluso en forma de Shusi, el bonito siempre es bien recibido en nuestra mesa.
El Guiso de Ternera y Champiñones es de esas recetas que tiene infinidad de versiones, aunque siempre el mismo secreto: cocción lenta y mucho cariño en su elaboración. Guisos de este tipo les hemos tomado toda la vida gracias a que son de esas recetas fáciles que se van pasando de madres a hij@s como otras propuestas similares que las tenemos marcadas en nuestro recetario tradicional.
El Rodaballo es uno de los pescados que más nos gustan en casa. Un pescado "fácil" de preparar que da un excepcional resultado. La receta más facil para preparar un buen rodaballo es la de "Rodaballo al horno". Una elaboración que no tiene más trabajo que colocar el rodaballo encima de una bandeja e introducirla en el horno. Aunque si queremos "complicarnos" más, tan solo tenemos que pelar unas patatas y cortarlas en láminas que harán de cama al rodaballo en cuestión. A la hora de comprar un rodaballo podemos pedirlo en la pescadería que nos le den entero y limpio de vísceras, o bien, que nos saquen los lomos limpios y nos guarden el resto de espinas para hacer un buen caldo de pescado.
Una de las recetas que no faltan en verano en nuestra mesa es la Vichyssoise (Vichisuá) o crema de puerros. Una elaboración que podemos tomar en caliente, templada o fría, como más nos apetezca, y con diferentes guarniciones. Si bien la Vichyssoise está deliciosa sin muchos aderezos, con un simple acompañamiento obtendremos un plato más sabroso y vistoso. Como en esta Vichyssoise con brevas y jamón ibérico.
Este arroz con cigalas y mejillones nos sorprendió a todos en la mesa por lo bueno que estaba. La verdad...
Hay que ver lo que puede dar de si un jamón de "los buenos". Además del placer de poder disfrutar de un buen plato de jamón ibérico en cualquier momento, y en cualquier ocasión, una vez que le dejamos "limpio" podemos hacer con él una buena cazuela de caldo que congelaremos para utilizar como base o "fondo" de arroces, guisos y deliciosas sopas. Para hacer un buen caldo de jamón lo más importante es "blanquear" los huesos de jamón durante unos segundos en agua hirviendo. Para ello, una vez tengamos cortado el hueso del jamón en trozos, (se lo podemos decir a nuestro carnicero de confianza), ponemos tres cazuelas con abundante agua a cocer.