La pluma es una pieza de carne muy jugosa con una forma ligeramente alargada y triangular, de un par de centímetros de grosor, como mucho, que es ideal para cocinarla a la plancha o brasa. Y como en los jamones, hay pluma de cerdo blanco o pluma de cerdo ibérico. Ni que decir tiene que la más jugosa y sabrosa es la pluma de cerdo ibérico. Si bien ya os hemos puesto alguna receta de pluma ibérica en El Aderezo, no está de más poner otra propuesta como esta "pluma ibérica con carpaccio de higos y champiñones".
Desde hace tiempo se viene usando en la cocina piezas de carne del cerdo ibérico que no son jamones, paletilla, lomos o solomillos y la pluma ibérica es uno de las más apreciadas. La pluma ibérica es la parte anterior del lomo del cerdo, ibérico en este caso, que no tiene nada que ver con la punta de lomo, que es un recorte del lomo y que lo llaman "filete de carnicero". La pluma ibérica es de forma triangular, no muy ancha de espesor y con un peso que se aproxima, más o menos, a los doscientos gramos. Una carne muy jugosa si lo hacemos en su punto, pero como todas las carnes, algo seca si nos pasamos.
La pluma es una pieza de carne muy jugosa con una forma ligeramente alargada y triangular, de un par de centímetros de grosor, como mucho, que es ideal para cocinarla a la plancha o brasa. Y como en los jamones, hay pluma de cerdo blanco o pluma de cerdo ibérico. Ni que decir tiene que la más jugosa y sabrosa es la pluma de cerdo ibérico.
La Pluma ibérica a la plancha con patatas asadas es una receta muy sencilla que no tiene ninguna complicación. Lo que si que tenemos que tener en cuenta es poner a macerar la carne un par de días antes, para luego poder saborear esta pieza de cerdo, más jugosa y llena de matices que le otorgarán las especias.