Está receta de Crema de membrillo y ciruela roja es una especie de mermelada con un sabor muy particular. La elaboración es la misma que un dulce de membrillo lo único es que, hay que añadir las ciruelas (sin hueso) junto con la carne de membrillo.
La mayonesa casera hay que evitarla no sea que nos infectemos por la salmonella. Si nos hiciera falta para algún plato es mejor (y más segura) , la comprada aunque siempre podemos hacer en casa “lactonesa”, una salsa con un sabor parecido a la mayonesa pero con la ventaja de que evitamos intoxicaciones gracias a que no lleva entre sus ingredientes el huevo. Nosotros en casa elaboramos lactonesa con la Thermomix, pero si no dispones de este práctico utensilio de cocina puedes usar una batidora normal.
Las Tartas de requesón o queso solemos prepararlas normalmente con una base de galletas y mantequilla. Aunque, de vez en cuando, también nos gusta disfrutar plenamente del sabor del requesón, sin que se vea empañado por el sabor que le aporta la galleta.En otras ocasiones hemos preparado Tartas de Requesón de diferentes formas, tipo quesada, con brevas, o bien en otras elaboraciones saladas como esta Ensalada de endivias rojas, requesón y uvas. La Tarta de requesón que os presentamos hoy es una propuesta verdaderamente deliciosa que no dejará indiferente a nadie. Además se puede servir sola, tal cual, o bien acompañada de cualquier confitura o mermelada que tengamos a mano.
A uno de los postres más tradicionales, los buñuelos de viento, los hemos rellenado de manzana e incorporado un inusual...
La primera sociedad que consumió buñuelos fue la morisca. Sus ciudadanos, gente de medios humildes, que habitaba los territorios del Sur de España y ocupaban puestos de trabajo de baja categoría, desempeñaban también el oficio de vendedores ambulantes de buñuelos. En Sevilla y Granada eran postre típico los buñuelos fritos en aceite cubiertos de miel. Por otro lado, esta especialidad fue adoptada por los gitanos tras la expulsión morisca y perpetuada hasta la actualidad.
Con buen pan y buenas viandas se anda un largo trecho y con esta Hamburguesa de pollo, más. El pan...
Estamos acostumbrados a preparar bizcochos de tamaño familiar, vamos de los de toda la vida. Ya sean redondos, cuadrados o rectangulares. Pero siempre de meter el cuchillo, cuando no es a pellizcos, para obtener un buen trozo que llevarnos a la boca. El otro día buscando un molde redondo (grande) para hacer un bizcocho me topé con unos moldes para tartaletas que tenía arrinconadas en el cajón. Me pareció un tamaño perfecto para hacer unos "bizcochitos". Dicho y hecho. ¡Lo tienen todo! Esponjosos, con el toque que le aporta la mantequilla y el aceite de oliva virgen extra, las nueces y sobre todo el sabor de la ralladura de limón y el tomillo fresco.
En casa nos encanta preparar bizcochos con fruta fresca. Da igual que sea con fresas, de coco, con plátano, con naranja, con manzana e incluso de melón, todos salen buenísimos, como este Bizcocho de albaricoques que os presentamos hoy.
Siempre que puedo (aunque quisiera más veces, lo reconozco), busco en el recetario alguna tarta de queso que me "alegre el día". Con el caso de esta "tarta de queso y manzana reineta" tuve un día inmejorable.
Soy un gran amante de las tartas de queso y cuando cayo en mis manos esta receta de tarta de queso o Käsekuchen no me pude resistir a elaborarla en mi cocina. El resultado mucho mejor de lo esperado (y eso que tenía muchas expectativas).
Aprovechando que están de temporada, y a muy buen precio, hemos preparado en casa una deliciosa conserva casera a base de cerezas: Mermelada de cerezas. Una receta que, al igual que el resto de mermeladas o confituras caseras, es fácil de hacer y deliciosa al paladar. Si bien tiene la "complicación" de quitar el hueso a las cerezas, el resultado tanto en tostadas, tartas de queso o como acompañante de alguna que otra carne, es simplemente delicioso.
En una sartén con unas gotas de aceite de oliva, ponemos a dorar por ambos lados, los filetes del salmón sazonados. Pasados dos minutos por cada lado, añadimos los zumos de las naranjas y el limón. Cuando veamos que se va ha consumir, sacamos los filetes al plato donde le vayamos a servir, añadimos a la sartén el azúcar, los piñones y las pipas, removemos y lo esparcimos por encima del salmón.