Dentro de las muchas variantes que nos ofrece la elaboración del «arroz» hoy os ofrecemos esta receta que preparamos el...
Se pueden comer enteras, en puré o como una sopa fría de verano, o como las comimos nosotros ayer, que están muy ricas. De las habas frescas podemos utilizar todo, tanto las vainas como las semillas. Las vainas pequeñas las podemos consumir enteras, igual que si fueran judías verdes, cocidas con un sofrito de ajo, mientras que las de mayor tamaño debemos desgranarlas antes de ponerlas a cocer. Son muy ricas en vitaminas como el ácido fólico, vitaminas B3 y C, tienen mucha fibra y aportan minerales como el potasio y magnesio.
Tras las fiestas navideñas volvemos con ganas a utilizar las verduras en nuestra cocina. En esta ocasión, tomando como ingrediente principal unas habitas tiernas que teníamos en nuestro congelador, hemos preparado esta receta: Habas con queso brie y pollo. Para hacer la receta de hoy hemos utilizado un par de bolsas de habas congeladas. Un producto asequible, y que siempre está "a mano", que podemos sustituir por habas frescas.
La historia del Roscón tiene varias versiones, pero la que mas predomina es que viene de los tiempos del Imperio Romano. En aquel entonces el 1 de marzo (que era por entonces cuando se celebraba el Año Nuevo) se elaboraban unas tortas redondas rellenas de higos, dátiles y miel que se repartían entre plebeyos y esclavos.