Cuando los días son grises y fríos nada mejor que un buen plato de cuchara para dar color a la jornada. Y si de color hablamos, el olor y sabor lo dejamos para el final, nada mejor que un buen plato de Judiones con berberechos y gambas. El plato por si sólo merece un monumento, pero si lo compartimos con los seres queridos, estos nos le harán a nosotros.
La quinoa quinua o quínoa, es denominado como un "pseudocereal" porque, aunque no pertenece a la familia de las gramíneas (en la que están encuadrados los cereales "tradicionales"), es usado como cereal gracias a su alto contenido de almidón. Aparte de que tiene el doble de proteínas que los cereales habituales, menos carbohidratos, vitaminas del grupo B, muchos minerales e incluso una dosis notable de grasas saludables. Y por si todo esto fuera poco, la proteína de la quinoa es muy completa, a pesar de ser vegetal, y contiene todos los aminoácidos necesarios para generar músculo. Después de todas estos datos, y si todavía no has probado la quinoa, espero que al ver esta receta de "Ensalada de quinoa con granada, navajas y berberechos", te entren las ganas...
¡Estos berberechos en salsa de Verdejo están para chuparse los dedos!.... Y no es para menos, además de fáciles de cocinar es una receta con un sabor a mar increíble. Una tapa o entrante de matricula de honor.
La Fideuá es un plato marinero que, como casi todos los platos populares, salen del ingenio de los cocineros, por necesidad. Y es que el origen de este plato tradicional del levante español fue fruto de la casualidad. El invento gustó, y la fama del plato se extendió por los restaurantes del puerto como la "Casa la Pastaora", donde se cocinaban las primeras "fideuaes", consagrándose como un plato característico e imprescindible".
Después de conocer el Codium Tomentosum o Ramallo de Mar, como es conocido popularmente este alga, y ver sus muchas posibilidades culinarias, nos hemos decidido a elaborar un sabroso risotto de codium con berberechos y brotes de rábanos Daikon.
El otro día en el súper estaban en oferta los bogavantes, creo recordar que el kilo rondaba los 15 euros. Como eran de buen tamaño, compre una pieza que rondó los 600 gr. Con él en la cocina, y otros cuantos ingredientes, me dispuse a preparar una fideuá de bogavante. Una elaboración verdaderamente deliciosa que sirvió para dar de comer a cuatro personas, de las cuales dos eran niños, pero repitieron ración.
Una receta con el mejor sabor del mar, un plato marinero autentico de pescado y marisco y todo un deleite para nuestro paladar y nuestros sentidos. Eso sí, la "caldereta de rape y cigalas" no es un plato para todos los días, pero para ocasiones especiales, esta receta sera un triunfo en la mesa seguro.