Las flores en la cocina parece una moda repentina pero lejos de la realidad han estado presentes desde hace mucho tiempo. Se elaboran fritas, rellenas, cocidas, en sopas, cremas, como adorno, etc., pero tenemos que tener en cuenta que la flor, como en el dicho o refrán, es de un sólo día. Hay que tratarlas con mucha delicadeza, ya que se rompen y estropean con la mirada. Después de lavarlas tenemos que secarlas sobre una hoja de papel absorbente antes de proceder a elaborarlas.
Aceite de Girasol
El Aceite de Girasol es muy adecuado para freír pues resiste el proceso de saturación del aceite a temperaturas de hasta 180 ºC. Este tipo de aceite impregna menos de grasa al alimento y en consecuencia el alimento frito absorbe menos grasas, y por tanto será menos calórico.
Artículo Al Azar
En casa el solomillo de cerdo como más nos gusta es hacerlo vuelta y vuelta en una sartén con unas gotas de aceite de oliva y unos ajillos fritos, pero de vez en cuando nos gusta elaborarlo de diferente forma como este Solomillo de cerdo relleno de langostinos o esta de Solomillo relleno con frutos secos; solomillo al horno con salsa de champiñones, en forma de tapa, etc. En esta ocasión hemos adobado previamente el solomillo de cerdo con una mezcla de especias para después cortarlo en medallones y hacerles en la sartén. Para acompañar, una crema elaborada con tomates deshidratados, queso grana padano y unas hojas de albahaca.
Preparamos mahonesa echando todos los ingredientes en el vaso de la batidora, batimos sin sacar las aspas del aceite hasta que asome una "nube blanca". Cuando esta llegue a la superficie del aceite es el momento de "sacar y meter" la batidora por el vaso, no te vicies mucho que se te puede cortar.
Hay veces que hacemos las recetas según las apetencias del momento. Ayer sin ir más lejos teníamos "antojo" de muffins pero no sabíamos de qué, hasta que el último momento decidimos elaborarles de yogur de frutas del bosque. El resultado salta a la vista. Unos muffins muy apetecibles ideales en cualquier hora del día.
En un bol grande, donde habremos echado las yemas, incorporamos el queso mascarpone, el zumo de mandarina, el azúcar, el aceite de girasol y el ron añejo. Mezclamos bien y añadimos la harina junto con la levadura y la pizca de sal. Volcamos las claras montadas y lo juntamos, con movimientos suaves, con el resto de la masa. Vertemos la masa en un molde que habremos engrasado anteriormente.
Del cerdo...¡hasta los andares! Y nunca un refrán quedó mejor para una receta. Es el caso de estas "manitas de cerdo en salsa". Una propuesta del recetario más tradicional que tiene infinidad de elaboraciones y presentaciones.
Después de elaborar el salmón en nuestra cocina de diferentes maneras como es al horno, a la plancha, en ensalada, etc., ayer, para la hora de la cena, preparamos un salmón confitado con guarnición. El salmón confitado es una receta muy fácil que no necesita de muchos utensilios. Basta con un cazo con el suficiente aceite para confitar el salmón, o cualquier otro pescado.
¡Que ricas están las croquetas de sepia!, o de cualquier otro tipo... ya que las croquetas se suelen elaborar para aprovechar algún resto de comida del día o de días anteriores.
Mientras pienso que propósitos hago de cara a la nueva temporada, voy a prepara una lasaña de verdura y carne que posteriormente congelaré en moldes, de unas tres o cuatro raciones cada uno, que nos serán muy útil para esos días que no hemos preparado la compra, no tenemos nada en la nevera o, lo más seguro, no tenemos tiempo para preparar la comida o la cena por otro tipo de obligaciones.
De niño recuerdo que mi madre preparaba filetes rusos en grandes cantidades, con la intención de que sobrasen y asi tener preparada la cena del día siguiente. Que por cierto, casi estaban más ricos que el día anterior. Me encantaba prepararme bocadillos de filete ruso y tomate frito casero. Toda una delicia. Ahora soy yo quien elabora los filetes rusos para mis hijos y me encanta ver como se montan sus propios bocadillos en la mesa, sin haberles dicho nada. ¿Será cosa de genes? Lo que sí que es cierto es que los filetes rusos en plato invitan al comensal a comérselos dentro de un buen trozo de pan. Y si encima se le añade una buena salsa de tomate casera, que se desparrama por nuestras comisuras de la boca en cada mordisco, la sensación de satisfacción será plena.
Hoy nos hemos decidido por realizar pequeños saquitos de pasta filo rellenos (unos de foie y dátiles, y otros de requesón), sobre blinis con mermelada de ciruelas.
Un bizcocho que sorprende, aparte de la elaboración en si con mayonesa, por la esponjosidad y el delicioso sabor a "chocolate" que tiene. La propia Auro nos indica en su blog de cocina que hay una gran diferencia, a la hora de elaborar este bizcocho, si nos decantamos por hacer la mayonesa en casa en vez de comprarla. A mi personalmente me ha sorprendido mucho y te aconsejo que pruebes a preparar uno. ¡Los siguientes vienen solos!