Reino Unido no sólo mantuvo su dominio en la II Edición de Copa Jerez sino que, incluso, lo incrementó.
No en vano, la pareja escocesa formada por el chef Kevin Sutherland y el sumiller James O’Donnell no sólo se alzó con el galardón al mejor menú de maridaje, sino que también se alzó con el mejor plato combinado con vinos dulces, es decir, ganaron dos de los cuatro premios en concurso.
Su propuesta fue exactamente la siguiente: Vieiras celtas salteadas, puré de castaña, manzanas y tacos de bacon ahumado, todo ello maridado con manzanilla, Pichón de Anjou, coles de Bruselas con hilos de carne de confit cocidas a fuego lento, remolacha, barquillo de patata y zumo de pasas con palo cortado VORS (40 años) y Plátano caramelizado y pastel de avellanas, helado de chocolate y crema de plátano, maridado con moscatel.
Cabe destacar que este postre fue, además, considerado el mejor plato combinado con jerez dulce.
A este premio (de nueva creación) se unieron otros dos: al mejor plato con jerez seco y con jerez semidulce.
Los ganadores de estos fueron el chef Jakob M. Hansen y el sumiller Alexander Berntsen (Dinamarca) por su propuesta de unas Lechecillas (mollejas) de ternera en café con coliflor, remolacha y sushi de jengibre, maridado con oloroso seco, y el chef Andy Nusser y la sumiller Nancy Selzer (Estados Unidos) por su plato Hígados con cinco cebollas maridados con palo cortado.
El jurado, que fue presidido por Juli Soler, socio de quien es considerado el mejor chef del mundo, Ferrán Adriá, contó con la presencia del más internacional de los cocineros ingleses, Heston Blumenthal, el escritor y sumiller Doug Frost (una de las pocas personas del mundo que posee el título master of wine y maestro sommelier) y Makoto Abe, considerado el mayor experto en vinos de Japón.
Es realmente destacable que la Copa Jerez de maridajes se esté haciendo un importante hueco en la gastronomía mundial.
Ayer mismo se destacaba que los ganadores de la primera edición (el chef y el sumiller del restaurante londinense Nothing Hill Brasserie) consiguieron un despunte realmente importante en el panorama gastronómico británico tras conseguir el primer premio.
Es casi seguro que algo parecido le sucederá al restaurante ‘Number One’ de Edimburgo.
Vía: europasur.com