La marca Maggi, famosa por sus sopas de sobre, ha comprado con fines publicitarios un anticiclón que está llevando a Alemania unos días de tiempo primaveral, informaron este sábado pasado meteorólogos de la Universidad Libre de Berlín.
El anticiclón ‘Maggi’ se está desarrollando desde el pasado domingo en Alemania, prometiendo sol y temperaturas de entre 11 y 16 grados.
En Alemania es posible patrocinar una borrasca (zona de baja presión atmosférica) por 199 euros o un anticiclón (zona de alta presión) por 299 euros.
En realidad no están permitidos patrocinios propiamente dichos. Sólo se permiten nombres propios comunes de persona. De mujer en los años impares y de hombre los pares.
En este caso, la empresa lo tuvo fácil, y pudo colar el nombre de la firma como el diminutivo familiar del nombre inglés Margaret (Margarita).
Además, los creativos de la agencia publicitaria Optimedia (responsable de la idea) contaban de antemano con la ventaja de que el nombre de la empresa de su cliente comienza la letra ‘M’.
Teniendo en cuenta que los nombres de los fenómenos atmosféricos han de listarse desde principios de año por orden alfabético, es bastante común que aquella que empiece por ‘M’ coincida con las deseadas fechas primaverales.
El dinero de estos patrocinios sirve para financiar un programa para los estudiantes de Meteorología de la Universidad Libre de Berlín.
Un dinero que para la multinacional es a buen seguro muy poco, ya que es a cambio de traer el buen tiempo a Centro-Europa.
Los meteorólogos berlineses pusieron en marcha hace cinco años esta nueva fuente de beneficios, de la que se ha aprovechado el director de marketing de Maggi (grupo Nestlé).
Estos patrocinios, sin embargo, están sometidos a unas reglas.
En 2007 los anticiclones no pueden tener más que nombres femeninos, mientras que en 2008 las borrascas tendrán nombre femenino y los anticiclones nombres masculinos.
Me temo para nuestro país lo peor como la idea resulte del agrado de alguno ya que comenzaron patrocinando los estadios de futbol, los teatros, lo dicho no sé donde llegaremos……