Te imaginas disponer en tu patio o huerto de dos naranjos que te den frutos que pesen cada uno más de un kilo…
Pues esto mismo es lo que le sucede a un matrimonio del municipio salmantino de Vilvestre, José Manuel Sánchez y Agustina Martín, los cuales, han recolectado varias naranjas, de dos árboles frutales de la clase «Navel», plantados a orillas del Duero, que tienen un peso medio de un kilo cada una y de un sabor muy dulce.
Los naranjos les plantaron hace 16 años junto al río Duero, en la frontera con Portugal, y el caso que tienen poca producción, cerca de 40 naranjas cada uno, pero si los multiplicamos por el peso de cada una, sale una buena caja de naranjas.
El record absoluto de peso en una sola naranja lo han batido este año con un kilo y doscientos gramos, motivo por el que la tienen expuesta (junto con otras más) en el bar que regentan en este municipio charro ubicado en Las Arribes del Duero, Salamanca.
El secreto, según relata el matrimonio, es, además del microclima que tiene el propio municipio de Arribes, el abono especial que le echan durante el año y que se conoce como «gallinaza», la basura que sacan de los gallineros o granjas de pollo, para entendernos.
Pues nada, a ver si encuentro un poco de este «sustrato» para mis tomates, que les tengo plantado en macetas y todavía no he visto ni uno…
Vía: elnortedecastilla