Recetas Paleo. La dieta de nuestros orígenes para una vida saludable es un nuevo libro en el cual encontramos recetas paleolíticas actualizadas a nuestro tiempo.
Son miles las personas que siguen a diario la denominada «Dieta Paleo«. Una forma de alimentación basada en lo que comían nuestros antepasados durante la era del Paleolítico. Un momento de nuestra historia en la cual el hombre era cazador-recolector, obteniendo sus alimentos a través de la caza y pesca, además de otros que recolectaban como raíces, vegetales, frutas o semillas.
Para determinar realmente qué se comía en la Edad de Piedra se han llevado a cabo varias investigaciones que han contado con la participación de arqueólogo y catedrático prehistoria Eudald Carbonell y su equipo del IPHES (Instituto Catalán de Paleoecologia Humana y Evolución Social).
Gracias a estas investigaciones Eudald Carbonell y la periodista Cinta S. Bellmunt han escrito «Recetas Paleo. La dieta de nuestros orígenes para una vida saludable«.
Como bien dice Eudald, este no es un libro sobre cómo hacer bien la dieta paleo, sino más bien una recopilación de platos inspirados en los alimentos que se consumían en el Paleolítico.
«Recetas Paleo» está compuesto por 60 recetas de cocina originales que, a su vez, están divididas en dos partes. En una primera parte hay la metodología de cómo cocinar cada receta tal y como las elaboraríamos hoy en día, siguiendo las típicas instrucciones de cualquier libro de recetas. Y la segunda parte, cómo lo haríamos en la época Paleolítica. Por ejemplo encontramos la receta de cómo hacer un delicioso «Faisán con castañas» en nuestros días y luego tenemos la versión paleo que sería «sal al campo, caza un faisán, escáldalo, desplúmalo y límpialo, etcétera.
Además, cada receta tiene su destacado de ¿Sabías que…? en la cual aportan información sobre el yacimiento donde se encontró el alimento, antigüedad de estos, anécdotas de los métodos de cocción e información destacada y curiosa referente al plato en cuestión.
Entre las diferentes recetas paleofood que encontramos en este libro están, aparte de la del faisán, «Mousse de médula batida con fresas», «Huevos cocidos sobre ascuas», «Almejas a la piedra con codorniz», «Costilla de cabra a la brasa», «Hummus de lentejas con zanahorias y robellones», o «Ensalada de espinacas y frutos del bosque», entre otras.
Para mejorar, o actualizar, los gustos de los alimentos que se incluyen en las recetas paleo, ya sean fríos o cocinados, podemos utilizar especias.
Con tan solo añadir pimienta, sal, grasas fundidas o aceites vegetales, las recetas paleofood que podrían resultarnos insípidas se convierten en platos diferentes aptos para todo tipo de paladares.